NOTICIAS UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN JUAN

Escenario de desempleo

La idea de un Ingreso Ciudadano Universal

La doctora Laura Garcés, de la UNSJ, explica cómo sería el instrumento que buscaría atenuar el desamparo económico en un contexto complejo.

...
Compartir en Facebook Compartir en Twitter Compartir en Whatsapp Compartir en LinkedIn

El Ingreso Ciudadano Universal (ICU) responde a una política de transferencia de ingresos que se viene discutiendo en el mundo hace muchos años, sólo que ha cobrado una notable relevancia en estos últimos tiempos de pandemia en que los Estados deben dar respuestas. La doctora Laura Garcés, directora de la Maestría en Políticas Sociales de la UNSJ, elaboró un artículo sobre la naturaleza de ese ingreso, el cual el último fin de semana fue publicado en el suplemento económico del diario Página 12. “El texto surgió porque venimos con la Red Interuniversitaria de Posgrados en Políticas Sociales teniendo contacto con el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Ellos están interesados en un ingreso ciudadano universal, por eso escribí ese aporte para el Ministerio, que se transformó en ese artículo”, explica Garcés.

En diálogo con Prensa y Canal Xama de la UNSJ, la especialista detalla que el ICU se trata de un ingreso que se otorgaría a la población sin ninguna condición a cambio. Sería un ingreso con características de prevención. “Como es universal, no espera a que sucedan las situaciones de pobreza, de desempleo; no espera a esa intermitencia a la que estamos sometidos en forma casi permanente, eso de la entrada y salida del mercado laboral, que es un problema estructural en el mundo. Sus tres características son la universalidad, la incondicionalidad y que es preventivo”, define.

Es decir que en la actualidad no hay garantías de atar la seguridad laboral a la seguridad social. Aunque “no quiere decir que no se puedan mejorar los niveles de empleos actuales, pero sí se sabe que por la robotización, por el avance del capitalismo financiero altamente especulativo y que no genera empleo, no va a haber empleos para todos y todas, no va a haber el pleno empleo que conocimos en otras décadas”, dice Garcés. “Por lo tanto –agrega-, hay que buscar otras maneras de sostener por lo menos las necesidades básicas de las personas, lo cual no quiere decir que ese piso sea algo a partir de lo cual las personas no puedan tener empleo, no es algo incompatible. O que puedan realizar otros trabajos socialmente útiles, como el trabajo doméstico, todos los trabajos de cuidado, el voluntario, el artístico, el cooperativo”.

Sobre el financiamiento del ICU, indica que hay un acuerdo “entre quienes estamos en esta línea de articular las políticas sociales – económicas en que, para que haya redistribución (lo van a recibir todas y todos, los sectores de más ingresos también), se financie con una modificación del sistema impositivo para que sea más progresivo. En Cataluña se hizo el cálculo de que el 20 por ciento de la población de más ingresos serían los que aportan más. También se debe financiar con el reemplazo de todas las políticas de transferencias de ingresos existentes. Por ejemplo, si el Ingreso Ciudadano Universal abarca a toda la población, la Asignación Universal por Hijo sería reemplazada por este nuevo ingreso, pero nunca debería representar menos monto. Y también recordemos que el ingreso sería individual, o sea que además lo recibirían los padres”, subraya la doctora Garcés.