Pablo Padín, secretario Administrativo Financiero de la UNSJ se refirió a la situación presupuestaria que atraviesan las universidades.
La Secretaría de Políticas Universitarias ratificó ayer que
los docentes universitarios no recibirán la suma fija remunerativa no bonificable de 5 mil pesos que el gobierno
nacional anunció como bono para los trabajadores estatales.
Además, los
funcionarios del Ministerio de Educación de la Nación no dieron respuestas favorables
a los distintos reclamos de los gremios docentes que, agrupados en Conadu y Conadu
Histórica, convocaron a una jornada nacional de protesta para los días 28, 29 y
30 de agosto.
El viernes 30 se realizará un plenario de rectores de las
universidades públicas, el CIN (Consejo Interuniversitario Nacional) y ahí se tratará
un reclamo de las universidades ante la Secretaría de Políticas Universitarias
para pedir el mismo adicional que cobrarán el resto de los trabajadores
estatales, además de otros temas económicos en discusión.
“Las universidades vienen complicadas en su presupuesto,
sobre todo en lo que es gasto de funcionamiento. Para el ejercicio 2018 y 2019
sólo tuvimos un incremento del 7% en promedio y, si tuvimos una inflación
acumulada arriba del 50%, entonces hemos perdido no menos de un 40% de posibilidades de hacer frente a los gastos
de funcionamiento”, dice el Secretario Administrativo Financiero de la UNSJ,
Pablo Padín, en una entrevista en el noticiero Universidad en Vivo del canal Xama.
Los
gastos de funcionamiento se cubren con una partida específica destinada al pago
de los servicios como luz, agua, gas, mantenimiento e insumos necesarios para
el funcionamiento de la universidad. “Venimos haciendo algunos ‘reordenamientos’
para mejorar los gastos. Por ejemplo, en 2016 comenzamos a reconvertir a luz
led el sistema eléctrico para reducir el consumo de energía . Otro
tema que nos beneficia hoy es tener una conectividad propia: tenemos nuestra
propia fibra óptica y no debemos subcontratar servicios que nos saldrían más
caros”, explicó el secretario.
“Las medidas económicas (anunciadas después de las PASO) son
de urgencia, se han tomado sin consenso y sin ningún tipo de herramientas para llevar
un control por parte del Estado, y no llegan a los bolsillos de los
trabajadores”, añadió Padín.
Estos últimos años las señales políticas hacia el sistema de
las universidades no han sido las mejores. “Estamos ante un horizonte complejo.
Las universidades tenemos que tener una sola voz a través del CIN, sea cual sea
el color político de los rectores”.
Entre los pedidos de las universidades figura el reclamo por
un adicional como el que recibirán los estatales. “No tenemos muchas ilusiones,
ni ninguna respuesta del gobierno nacional. Espero que la fuerza que le va a
dar el plenario del CIN del día viernes al pedido sea mayor”, concluyó Pablo
Padín.