NOTICIAS UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN JUAN

Ballotage

DECLARACIÓN EN DEFENSA DE LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA

Con gran cantidad de firmas, se difundió un documento con miras a las elecciones.

...
Compartir en Facebook Compartir en Twitter Compartir en Whatsapp Compartir en LinkedIn

En la mañana de ayer, integrantes de la comunidad universitaria suscribieron un documento en defensa de la educación universitaria, durante los actos desarrollado frente al Edificio Central y en la FAUD. El primero de estos actos contó con la participación activa de SIDUNSJ, que instaló una mesa en la vereda e instó a docentes, investigadores, estudiantes y personal de apoyo a adherir al documento con su firma. Estos son los términos del documento: Los miembros de la Universidad Nacional de San Juan tenemos muy en claro que la educación universitaria “es un bien social y derecho humano fundamental y universal”. Aún con posturas políticas divergentes, con distintas trayectorias profesionales y desarrollos académicos diversos: docentes, estudiantes, investigadores, personal de apoyo, defendemos sin concesiones este principio y proclamamos con decisión defender lo logrado hasta ahora en nuestro país. Tal como expresó el CIN en su documento, entendemos que el rol de la universidad pública y gratuita debe comprender una interacción cada vez más fuerte y coordinada con los diferentes actores sociales de nuestro territorio, incluyendo a todos los poderes públicos, al servicio productivo y a cada uno de los niveles del estado. Desde este lugar, como instrumento de un proyecto de país que seguimos apoyando, nos expresamos por la ciencia, la técnica, la innovación productiva, la investigación, construidas e integradas por la totalidad de habitantes de nuestro país. Sin importar procedencia social, geográfica, étnica, religiosa. Mucho hemos logrado y quedan importantes desafíos por cumplir. Queremos seguir desde lo que tanto ha significado lograr, y nos referimos por ejemplo a la ley que nos asegura un 6% del PBI destinado a la educación, reclamando la continuidad de la política de incremento anual y progresivo del presupuesto universitario, el cual debe alcanzar el 1,5% del PBI en el 2020 y el 2% en el 2025. Hablamos del programa de Infraestructura Universitaria, que financió obras de remodelación y construcción en varias casas de estudio. Sólo en San Juan señalemos algunas: Laboratorio de Materialidad en FAUD, Laboratorio de Alta Tensión, edificio de FACSO, Escuela de Música, aulas en los Institutos Preuniversitarios Industrial, Comercio y Central, Talleres en el IPU Industrial, edificio de Salud Universitaria, nuevo Comedor Universitario en el CUIM, sede de la Delegación Valles Sanjuaninos en Jáchal, obras diversas en El Palomar, Bienestar Universitario, diferentes unidades académicas, secretarías, rectorado. Hablamos también de los Programas de Mejoramiento de la Calidad Universitaria, tales como PROMEI, PROSOC, PROHUM, PRONGEO, Agro, de la Recuperación de la Educación Técnica, del Desarrollo de Programas como Conectar Igualdad, de la creación de más de 9 universidades que le han permitido a muchas familias tener su primera generación de profesionales, de los diversos programas de apoyo económico para estudiantes como el PROGRESAR, que han llevado de 2.800 becas en el año 2001 a más de 70.000 en el presente año, de las políticas de Ciencia, Tecnología e Innovación que incluyó la creación del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, del rol que el estado nacional ha otorgado a las universidades públicas, como consultoras prioritarias que además de reconocer y dar espacio y participación en el diseño de políticas públicas, terminó con tantos manejos “no claros” de otras épocas. Retomamos palabras de los rectores del sistema público nacional al destacar que apostamos a profundizar las acciones tendientes a la construcción de un país que opte por concientizar en la necesidad de afianzar los derechos alcanzados y profundizar la distribución del ingreso, tendiendo a la igualdad real de oportunidades sin discriminación de ninguna índole. Impulsar con los programas científicos universitarios argentinos sigan contribuyendo a las acciones de reindustrialización y de agregación de cadenas de valor vigente. Reconocer la importancia fundamental que tienen las ciencias (exactas, físicas, naturales, humanas, sociales) el arte y la tecnología, para el proceso de recuperación estratégico de la industria energética, las industrias culturales, las tecnologías relacionadas con la alimentación y la salud, el transporte ferroviario y naval y de aquellos nichos de innovación tecnológica. Destacar que las universidades públicas deben contribuir a planificar las políticas educativas, tecnológicas y culturales, con el conjunto del estado y de las organizaciones productivas y del trabajo del país. El sistema universitario reclama no perder lo logrado y seguir trabajando por el porvenir que sin duda nos debe llevar a mejorar la calidad de vida de todos los argentinos.