Cada 21 de junio los pueblos andinos conmemoran el Inti Raymi (Fiesta del Sol), con el retorno del Tayta Inti (Padre Sol).
El 21 de junio comenzó la celebración del nuevo Año Andino con la conmemoración del Inti Raymi (Fiesta del Sol). Este 24 de junio culmina esta celebración con el retorno del Tayta Inti (Padre Sol) y esto da inicio al año para los pueblos indígenas.
Para esta fecha, los pueblos originarios celebran reunidos, desde la puesta del sol hasta después del amanecer, para encomendar su siembra y espíritu al sol, pidiendo abundancia y sanación.
Al tratarse de una celebración incaica, se mantiene como un rito para muchas comunidades indígenas de legado incaico, algunas de las cuales están asentadas en otras partes del antiguo territorio inca, como en Perú, Ecuador, Bolivia, Argentina, Colombia y Chile.
En nuestra provincia, las comunidades huarpes realizan una gran fogata para purificarse durante la noche, esperando ver durante el amanecer al sol bailar en el cielo.
El inicio de esta celebración coincide con el “We Xipantu” o “Nquillantún”, un término mapuche que significa “Año Nuevo” o “Salida del Nuevo Sol”. Para los mapuches el sol nace con la llegada del invierno, allí se vuelve joven y luego adulto en la primavera, envejece durante el verano austral y comienza a morir en otoño, cuando los árboles pierden sus hojas y los animales cambian el pelaje.
Además, el último día de esta celebración coincide con la Fiesta de San Juan, también llamada víspera de San Juan o Noche de San Juan, fecha cristiana que recuerda el nacimiento de San Juan Bautista, el 24 de junio.
Escribe: Belén Ferrer.