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Una práctica socioeducativa que construye sueños

Querían hacer su casa, pero no tenían los planos: estudiantes de la Industrial los diseñarán

El matrimonio albardonero aprendió albañilería para construir ellos mismos, pero no podían pagar la carpeta técnica.

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María y Javier son un matrimonio albardonero, que decididos a construir su propia casa, se anotaron en un curso de oficio ofrecido por la Escuela Industrial Domingo F. Sarmiento (EIDFS), en el marco de la Escuela de Oficios de la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ), para aprender el oficio de albañiles. Con intención y voluntad, emprendieron el aprendizaje, pero a poco andar fueron los propios profesores quienes les hicieron notar que no podrían llevar adelante su proyecto sin una carpeta técnica y sin planos, paso previo imprescindible para cualquier construcción.

Y cuando la idea parecía naufragar, apareció la ayuda.

El profesor José Grosso, docente a cargo del Proyecto de las Prácticas Socioeducativas de la EIDFS, narró: “Les consultamos a María y Javier si ya tenía la carpeta técnica, es decir los planos arquitectónicos, estructurales para poder hacer la construcción, a lo que respondieron que no y que no tenían los recursos para poder contratar personal especializado. Es ahí donde nosotros decidimos implementar la curricularización de las prácticas socioeducativas a través del Departamento de Construcciones de la Industrial. En reunión con docentes, se acordó la realización de la carpeta técnica y además, les consultamos a los/as estudiantes si estaban dispuestos/as, lo cual les generó mucha motivación, porque adquirirían un aprendizaje basado en un proyecto real con todos los beneficios que esto implica cuando se tienen clientes reales”.

El proyecto es interdisciplinario, porque participa también el Departamento de Electromecánica de la Escuela que confeccionará el plano de instalación eléctrica. También se van a entregar planos sanitarios, y la instalación de programas económicos por parte cómputos y presupuestos, para que el matrimonio pueda planificar como tienen que ahorrar y gastar el dinero para poder concretar sus sueños de la casa propia.

María y Javier ante tal acontecimiento no podían creer lo afortunados que eran y cuando se reunieron con la comunidad educativa manifestaron su emoción, alegría y gratitud ante el proyecto, “ya que esto es de mucha ayuda para nosotros” - dijeron.

Sin embargo, no eran los únicos felices. Los/as estudiantes manifestaron que esta es “una gran oportunidad para nosotros de poder llevar a la vida real todos los conocimientos aprendidos a lo largo de la especialidad y de toda la escuela. Y de seguir aprendiendo porque lo que vemos en un proyecto aplicado es mucho más de lo que se puede aprender en el pizarrón, entonces es realmente una experiencia que no sólo nos ayuda a reforzar lo que ya sabemos sino a expandir nuestros conocimientos y a aprender a adaptarnos a algo que nos está preparando para un futuro profesional”

Por su parte el director de la EIDFS Jorge Gutiérrez expresó que “esta actividad tiene como antecedente la creación en el 2014, por parte de la Escuela Industrial, de un Programa de Artes y Oficios, aprobado por unanimidad en el Consejo Superior, que tenía la intención de recrear la Escuela de oficios que tuvo la Industrial originalmente, donde hasta 1964, se podía egresar desde las Tecnicaturas o desde la Escuela de oficios”.

“Dado que esta es una escuela técnica -continuó diciendo la autoridad- donde sus estudiantes aprenden oficios tanto en el ciclo básico como en el ciclo técnico. queríamos proponer algo destinado para aquellos/as estudiantes que egresan de la Escuela y no pueden o no quieren insertarse en la Universidad y sólo se ponen a trabajar. Entonces vimos que darles un oficio era volver a abrirles la puerta a una inserción laboral. A la vez nos dio mucha alegría saber que la Universidad después, creó una Escuela de oficios y quien mejor que nuestro docente José Grosso, el que esté a cargo desde la Industrial de todos los oficios que la Escuela puede ofrecer”,

Por otro lado, y siguiendo el camino de volcarse a la comunidad con las prácticas socioeducativas, la Escuela Industrial visitó el departamento Ullum acompañando al rector de la UNSJ, y al decano de la Facultad de Arquitectura, donde Gutiérrez concluyó: “Resultó muy valioso poder articular con el municipio, porque de esta manera la oferta se amplía. Ya que, a la escuela de oficios tradicional, se suman los otros oficios que pueden ofrecer las otras unidades académicas. Desde el Departamento sanjuanino, es como que estaban esperando la llegada de estos cursos. La Universidad está donde tiene que estar. La UNSJ en general y la Escuela en particular tienen muy buenos docentes y esto es poner manos a la obra, salir a la sociedad con prácticas sociocomunitarias, para que los/as estudiantes puedan insertarse en problemáticas comunes y con soluciones que ellos/as mismos llevan, fruto de todo lo aprendido y las capacidades adquiridas en la Industrial”