Los temas del XX Congreso Argentino de Herpetología que se realiza en la UNSJ son muy variados. Abarca desde la conservación de anfibios y reptiles hasta el manejo de recursos naturales, pasando por la extinción de la fauna a la que asiste el planeta en estos tiempos. También tiene vinculaciones con la parasitología en anfibios y reptiles, la ecología, la fisiología o el manejo de recursos naturales. Dentro de la zoología, la Herpetología estudia a los reptiles y a los anfibios (sapos, ranas, lagartijas, serpientes, tortugas, etc.). Este Congreso que aborda el mundo de estos seres vivos en peligro es organizado por la Asociación Herpetológica Argentina y la UNSJ, a través del Departamento de Biología de su Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales (FCEFN).

Extinciones

Un tópico que ocupa un lugar relevante en el Congreso tiene que ver con el cambio climático. “Mundialmente hay trabajos, sobre todo en Estados Unidos y México -y acá está exponiendo uno de los autores de esos trabajos-, en los que ya se ha confirmado la desaparición definitiva de muchas especies de lagartijas y anfibios, afectadas principalmente por el calentamiento global. Somos conscientes de que el calentamiento sigue y difícilmente se pueda revertir esa situación. Lo que podemos hacer ahora es un diagnóstico del tiempo que les queda a esas especies. Haría falta un cambio de paradigmas en cuanto a la energía y demás para solucionar este problema”, confió el biólogo Juan Acosta, de la FCEFN y uno de los organizadores del Congreso.

Fausto Méndez, biólogo de la Universidad Autónoma de México, señaló que toda la biota del planeta está expuesta a este cambio climático. “Los anfibios y reptiles son más susceptibles porque dependen de la temperatura del ambiente, en cambio aves y mamíferos pueden termorregular mediante mecanismos fisiológicos. Cuando las temperaturas se incrementan, los reptiles y anfibios restringen sus tiempos de actividad, lo cual promueve su extinción”, dijo el especialista.

Feminización de poblaciones

En ese sentido, al margen de que las potencias mundiales deben cesar ya la destrucción del medio ambiente, Méndez apuntó que hay sitios a proteger porque ofrecen condiciones climáticas que favorecen la persistencia de esas especies. Serían como sitios refugios. “Hay tortugas marinas, cocodrilos y lagartijas, por ejemplo, que al subir la temperatura, se calientan sus nidos. El sexo de esas especies depende de la temperatura de incubación, entonces a nivel mundial hay una feminización de poblaciones. Lo que ocurre es que la temperatura alta promueve la existencia de hembras, mientras que la producción de machos se da a temperaturas bajas. Con el calentamiento del planeta se están feminizando las poblaciones, entonces tenemos que ver cuáles son las playas y sitios que puedan promover la producción de machos”, dijo. Es lo que puede hacer la ciencia, los investigadores: detectar lugares de refugio para las especies ante el mal mayor que es la acción corrosiva humana.

Especies de San Juan

La fauna de anfibios y reptiles en San Juan, aunque no lo parezca, es muy diversa. Hay especies nocturnas, como lagartos; hay 15 especies de anfibios, 28 de lagartijas y 19 especies de serpientes. Juan Acosta dijo que hay mitos sobre lagartijas venenosas en Argentina y San Juan. “Al contrario, son beneficiosas: se alimentan de larvas de vinchucas o arañas”, explicó.